Talento sénior: las siete preguntas que aclararán su papel en tu empresa
La gestión del talento sénior es uno de los más importantes retos de la gestión de los recursos humanos en la actualidad. Las economías más desarrolladas van cambiando su pirámide de población, con un peso creciente de las personas mayores. Los trabajadores más veteranos, además, vienen siendo testigos importantes de la secuencia de cambios de las últimas décadas en el entorno laboral y empresarial.
En esta entrada analizaremos las principales preguntas que despierta el fenómeno del talento sénior, a fin de comprender mejor su abordaje. No hay que olvidar nunca que el activo más valioso de cualquier negocio son las personas que están detrás.
¡Comparte! Conoce qué papel puede desempeñar el talento sénior en tu empresa
1) ¿Qué puede aportar el talento sénior?
Por un lado, el talento sénior es, normalmente, el que mejor anclaje tiene con el pasado. Eso es muy importante porque no es raro tener que dar pasos hacia atrás. La innovación no pocas veces se fundamenta en el ensayo y en un trayecto por recorrer. Cuando ese ensayo no da el fruto esperado, una decisión que puede ser prudente es valorar el camino que se ha recorrido.
El talento sénior tiene una experiencia que aportar en la reflexión acerca de la senda por la que se ha transitado. Pueden describir mejor que nadie las razones por las que se cambió en algún aspecto en un momento determinado. De esta forma, es más sencillo comprender qué es lo que falla y poner un remedio provisional o incluso encontrar uno definitivo.
Por otro lado, existen destrezas profesionales que exigen una larga etapa de aprendizaje. Desperdiciar el talento sénior supone una renuncia a esas destrezas.
2) ¿Qué tareas puede desempeñar?
Su función más importante es la de prestar consejo, resolver consultas, expresar opiniones, elaborar recomendaciones, analizar procesos, etc. Eso permite simultáneamente que los trabajadores más veteranos puedan aportar sus conocimientos y destrezas y que los más jóvenes vayan asumiendo la toma y ejecución de decisiones y las responsabilidades asociadas con el respaldo del asesoramiento proporcionado por los más mayores.
También es muy importante la labor de adiestramiento y evaluación de las nuevas generaciones de personal. Para los jóvenes, pueden ejercer una labor de mentores; para la empresa, una labor de formadores y asesores en la selección de personal y la asignación de los puestos de trabajo.
El talento sénior es, además, relevante en labores representativas. Pueden ser interlocutores con empresas o particulares con los que haya mantenido una relación durante muchos años.
Aquellos veteranos que despliegan mayor liderazgo dentro de la plantilla pueden ser idóneos en muchas situaciones para ejercer labores de mediación. Por ejemplo, pueden mediar informalmente en conflictos entre trabajadores.
3) ¿Cómo puede desarrollar sus labores?
Para que puedan desarrollar correctamente sus labores, es importante aclarar varios aspectos. El primero de ellos es el tipo de jornada que van a realizar. Las opciones son múltiples:
- Jornada completa
- A tiempo parcial
- Jornada flexible a discreción de la empresa, del trabajador o de mutuo acuerdo
- Disponibilidad permanente para cualquier necesidad
- disponibilidad para necesidades puntuales
- Otras
En segundo lugar, es importante clarificar cómo se va a desarrollar jurídicamente la colaboración. Hay que valorar si se va a optar por una relación laboral o mercantil. En caso de optar por una relación mercantil, habrá que estudiar si conviene contratar con un marco de largo plazo o en función de cada necesidad concreta. Además, un caso especial es el del sénior propietario o administrador de la empresa.
Por otro lado, hay que planificar la jubilación del sénior, analizando detenidamente las necesidades y el marco temporal de caso. Entre otras opciones, por ejemplo, se puede:
- Posponer la jubilación (de forma indefinida o por un tiempo)
- Reenganchar a un trabajador con la jubilación flexible
- Planificar una jubilación parcial con contrato de relevo
- Optar por una jubilación activa
4) ¿Cómo se puede potenciar los beneficios del talento sénior?
Es crucial generar el entorno adecuado, en el que se minimicen las dificultades y se saque el máximo provecho al talento sénior.
Normalmente, llega un momento en el que el trabajador veterano va progresivamente abandonando la línea jerárquica, para centrarse en otras labores relacionadas con el asesoramiento, consultas, vigilancia, control, formación, representación, etc. Aunque esas labores puedan situarse fuera de la línea jerárquica, afectan a la labor de aquellos trabajadores que sí están en ella.
Por ese motivo, es importante perfilar un marco de relación que propenda a reducir los conflictos con trabajadores que sí están dentro de la línea jerárquica. Y no solamente se trata de crear un marco de colaboración, sino también de que tanto los veteranos como el resto de trabajadores sean conscientes de que la mejor opción para ambos es cooperar.
5) ¿Cuándo y hasta cuándo pueden desarrollar su trabajo?
Una de las dudas más frecuentes es la relativa a cuándo debemos incluir a un trabajador dentro del perfil sénior. Se puede optar hacerlo automáticamente al cumplir una determinada edad, normalmente anterior a la legal de jubilación. Aunque puede parecer una solución sencilla hay que tener en cuenta que existen distintos tipos de talento sénior. Por ejemplo, las características pueden variar en función del puesto.
Una segunda posibilidad es crear perfiles sénior individualizados a los que cada trabajador se incorporaría no solamente en función de la edad, sino también de sus propias circunstancias personales. Es un reto más complejo, fundamentalmente por las repercusiones en la política de incentivos de la empresa. Durante la época previa, los trabajadores pueden modular su esfuerzo en función de sus expectativas sobre las posibilidades que tengan de negociar las condiciones de su perfil sénior individualizado.
Por lo que se refiere al momento de finalizar la relación, hay que estar atentos tanto a las condiciones del trabajador como a su motivación. En ese sentido, se hace muy recomendable evaluar el rendimiento de forma continua, a fin de adaptar las condiciones.
6) ¿Quiénes son los destinatarios principales del trabajo realizado por el talento sénior?
Normalmente, el cliente debe ser el centro de la empresa. En ese sentido, por una parte, los veteranos tienen más facilidad para comprender los requerimientos de los clientes más antiguos y los públicos más mayores.
Además, el veterano tiene una experiencia detrás. Sabe cómo se han resuelto los retos que implica su profesión en diversas épocas. Conoce soluciones tradicionales que suponen una importante red de seguridad cuando fracasan las más modernas. Eso es muy valorado por el público más joven, ya que le permite optar por soluciones más novedosas con mayor tranquilidad.
Pero, además, el talento sénior es un punto de referencia en otras relaciones. Por ejemplo, su participación en los proyectos puede ser determinante para ganar la confianza de proveedores de bienes y servicios, de financiación o, incluso, de los propios socios de la empresa.
7) ¿Con quién debe colaborar?
En primer lugar, deben colaborar con los trabajadores más jóvenes, menos experimentados o recién llegados. En muchos casos pueden ejercer de mentores de estos trabajadores. Los veteranos también pueden jugar un papel importante en la selección y evaluación del desempeño de estos trabajadores.
No menos importante es la colaboración con las generaciones intermedias. De forma natural, se va produciendo un relevo en algunas tareas que anteriormente llevaban los veteranos. Su experiencia puede servirles de mucha ayuda. Además, esa colaboración puede marcar las expectativas sobre el futuro profesional de los miembros de la generación intermedia. La conclusión que deben sacar es que su esfuerzo actual no solamente es reconocido con justicia en la actualidad, sino que también lo será en el futuro.
Y, por supuesto, debe haber una colaboración entre veteranos. Aunque hayan vivido momentos semejantes, la experiencia tiene elementos individuales. Los talentos más provechosos suelen ser los menos habituales en otras personas. Seguir en contacto con miembros de la misma generación facilita redescubrir las diferencias. De este modo es más sencillo que tanto la empresa como los propios veteranos averigüen qué talentos de cada uno son especialmente útiles para el momento concreto en el que se vive.
El talento sénior es un recurso preciado que no debemos despilfarrar. Las empresas más dinámicas deben saber coordinar las aportaciones de cada trabajador o grupo de trabajadores. Además, el talento sénior no solamente es muy importante, sino que su importancia irá creciendo en el futuro.