Cuenta de pérdidas y ganancias para emprendedores inexpertos

Lo más importante para comprender qué significa la cuenta de pérdidas y ganancias es entender que recoge el resultado del ejercicio y los ingresos y gastos de los que procede según su naturaleza. Hacemos un repaso en este post.

• Sigue siendo un instrumento muy útil tanto para seguir la evolución del propio negocio como para proyectarla a terceros
• La normativa distingue ingresos y gastos que van a la cuenta de pérdidas y ganancias de otros que se imputan en el patrimonio neto

En la mente de los emprendedores inexpertos, aumentar el saldo positivo de la cuenta de pérdidas y ganancias figura, en la mayoría de los casos, como uno de sus principales objetivos.

Con el paso del tiempo, se van dando cuenta de que existen otros objetivos más allá del beneficio y, sobre todo, que no todos los beneficios aparecen en la contabilidad. Sin embargo, la cuenta de pérdidas y ganancias sigue siendo un instrumento muy útil tanto para seguir la evolución del propio negocio como para proyectarla a terceros.

¿Qué es la cuenta de pérdidas y ganancias?

Es un documento contable que recoge el resultado del ejercicio y los ingresos y gastos de los que procede según su naturaleza. Por ello, lo importante para comprender qué significa la cuenta de pérdidas y ganancias es entender que es el resultado del ejercicio y no confundirlo con otros conceptos semejantes.

El resultado del ejercicio es una cifra contable que responde a la diferencia entre ingresos y gastos contables. Los ingresos son entendidos como cualquier aumento de los activos o disminución de los pasivos que no tiene como causa una aportación de los socios o propietarios de la empresa. Mientras, los gastos representan el concepto contrario, es decir, aumentos de los pasivos o disminuciones de los activos que no se relacionan con distribuciones a los socios.

Sin embargo, en la actualidad, hay que precisar que la normativa contable distingue ingresos y gastos que van a la cuenta de pérdidas y ganancias de otros que se imputan directamente en el patrimonio neto.

Mientras el balance nos muestra una imagen de un momento concreto de cierre, la cuenta de pérdidas y ganancias nos informa de lo sucedido a lo largo de un período detallando todos los ingresos y gastos del ejercicio.

Semejanzas y diferencias de la cuenta de pérdidas y ganancias con otros conceptos

Los ingresos y gastos reflejados en la cuenta de pérdidas y ganancias son el punto de partida para la determinación de la base imponible del Impuesto sobre Sociedades y también del rendimiento de las actividades económicas, en estimación directa, en el impuesto sobre la renta de las personas físicas cuando el contribuyente está obligado a formular cuentas anuales.

De hecho, la Ley del Impuesto sobre Sociedades establece que “la base imponible se calculará, corrigiendo, mediante la aplicación de los preceptos establecidos en esta Ley, el resultado contable”. En ese sentido, es importante tener en cuenta que, salvo algunas excepciones, para que un gasto sea deducible fiscalmente debe haber sido contabilizado.

Otro concepto próximo al del resultado contable que refleja la cuenta de pérdidas y ganancias son los flujos de tesorería (cobros y pagos). A pesar de ser conceptos cercanos, surgen muchas diferencias. Lo podemos ver de forma bastante gráfica en el estado de flujos de efectivo incorporado en los modelos normales de cuentas anuales.

El estado de flujos de efectivo también parte del resultado contable para calcular el importe del aumento o disminución neta de efectivo. A continuación, va realizando diferentes ajustes y reclasificaciones. Con ellos salva las diferencias entre ambos conceptos sumando y restando lo necesario para pasar del resultado del ejercicio al flujo de efectivo. Al mismo tiempo, ordena la información de manera que nos exprese las principales fuentes de entrada y salida de dinero de la empresa.

¿Cómo se presenta una cuenta de pérdidas y ganancias?

Los dos formatos más empleados son el vertical y el de doble columna:

1. En el de doble columna, aparecen todos los ingresos a la derecha y todos los gastos a la izquierda. Este formato fue empleado en la confección de las cuentas anuales durante la vigencia del anterior plan general de contabilidad. Los planes actuales aplican el formato vertical.
2. En el vertical, en primer lugar aparece una cifra relacionada con el importe de las ventas o las prestaciones de servicios realizadas. En los modelos de cuentas anuales de los planes generales de contabilidad españoles es el importe neto de la cifra de negocios. A continuación, se van sumando otros ingresos y gastos que tienen una relación entre sí.

En cualquier formato de cuenta de pérdidas y ganancias, vamos encontrando diferentes resultados o márgenes que muestran la diferencia entre ingresos y gastos de determinado tipo. Así, en los modelos del plan general de contabilidad actual, se diferencian los resultados de explotación de los financieros. El resultado antes de impuestos se obtiene como la suma de ambos, mientras el resultado del ejercicio se calcula restando el importe de los impuestos sobre beneficios.

Por otro lado, la información presentada en la cuenta de pérdidas y ganancias puede ser empleada para reconstruirla con fines no relacionados con las obligaciones contables. Por ejemplo, el cálculo del ebitda parte de un formato semejante, pero desde una aproximación diferente, ya que no es una cifra que deba aparecer en las cuentas que se depositan en el Registro Mercantil ni está sujeta, en consecuencia, a unas normas obligatorias para su formulación.

La cuenta de pérdidas y ganancias es un punto de referencia inexcusable en la gestión empresarial. De la información contenida en ella parten muchos cálculos con interés en ámbitos tan diversos como el fiscal, el financiero, el de la planificación y presupuestación, el del control, etc. Además, no debemos olvidar la repercusión jurídica que tiene el resultado contable que refleja, especialmente en las sociedades de capital, donde su aplicación es uno de los puntos obligatorios del orden del día en las juntas generales ordinarias de socios.