Estrategia y Gestión

Cómo aplicar la matriz de criterios para la resolución de problemas

Descubre cómo utilizar la matriz de criterios para mejorar el proceso de toma de decisiones y resolver cualquier problema en tu empresa.

Dos compañeras revisando datos

¿Te enfrentas a una decisión compleja en tu empresa? La matriz de criterios puede ser tu mejor aliada. Esta herramienta te ayudará a evaluar diferentes opciones, sopesar pros y contras y tomar acciones más objetivas.

  • Una matriz de criterios te ayudará a poner las cosas en perspectiva, evaluando los criterios y las opciones sobre la mesa.
  • Te detallamos los pasos que debes dar para aplicar con éxito una matriz de criterios y mejorar tu proceso de toma de decisiones.

En la gestión empresarial la agilidad en la toma de decisiones es un factor determinante para el éxito del negocio. Uno de los métodos más útiles para mejorar el proceso de toma de decisiones es la matriz de criterios, una herramienta que te ayuda a priorizar las diferentes opciones para solucionar un problema.

Para resolver un problema, se pueden presentar diferentes alternativas, pero si no se utiliza un método objetivo para su resolución, podemos acabar tomando la peor decisión. Para evitarlo, podemos utilizar el modelo de Richard Wallen junto a la matriz de criterios. Al utilizar este método, actuaremos de forma ordenada y sin abandonar ninguna alternativa de resolución sin analizarla antes. 

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¿Qué es la matriz de criterios?

Una matriz de criterios es una técnica de análisis que se utiliza para facilitar la toma de decisiones ante problemas complejos. Estos problemas pueden tener varias soluciones en principio viables. 

Para ello, se evalúan de manera sistemática las diferentes alternativas utilizando una tabla, donde las filas representan los diferentes criterios a ponderar y las columnas representan las opciones que se están considerando.

Ventajas de implementar matriz de criterios para solucionar problemas

Una matriz de criterios te permitirá escoger la mejor solución en situaciones complejas que presentan muchas alternativas: 

  • Tomar decisiones basadas en hechos y datos.
  • Visualizar las ventajas y desventajas de cada opción de manera clara y concisa.
  • Comparar directamente las diferentes alternativas.
  • Priorizar entre las opciones que mejor se ajustan a tus objetivos y restricciones.

Por ejemplo, al elegir un nuevo software para tu empresa, podrías valorar características como el coste, la facilidad de uso, las funcionalidades, entre otros. 

Cada una de estas características recibiría una ponderación dependiendo de su relevancia para tu negocio, lo que te permitirá hacer una elección más objetiva.

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Pasos del método de Richard Wallen para la resolución de problemas

Para solucionar un problema, el modelo de Richard Wallen actúa de forma ordenada, sin descartar a priori ninguna alternativa de solución. Para ello, enfrenta todas las soluciones existentes a los mismos criterios que se definan por la organización. 

La matriz de criterios se integra dentro del modelo de Richard Wallen. 

Los pasos de este modelo son los siguientes:

  1. Define el problema.
  2. Localiza las alternativas disponibles para solucionar el problema.
  3. Evalúa las soluciones.
  4. Elige las mejores soluciones.
  5. Crea un plan de acción para implementar la solución.
  6. Ejecuta la solución.
  7. Evalúa.

1. Define el problema

Lo primero es definir claramente el problema o la decisión que necesitas tomar. Asegúrate de que todos los involucrados comprendan la situación, las ramificaciones que puede tener el problema y que estén alineados con el objetivo de la resolución. 

Debemos tener en cuenta que el problema no se puede estudiar de forma aislada sin atender su origen. En muchos casos, la solución la encontraremos en esta misma fase.

Además, debes establecer qué aspectos son fundamentales para evaluar las alternativas. Los criterios deben ser relevantes para la decisión. Por ejemplo, si estás eligiendo un proveedor, podrías considerar el precio, la calidad, descuentos en factura, etc. 

En este punto es donde entraría la matriz de criterios que, además, podemos fusionar con otros métodos de toma de decisiones como las 5 M. Aunque no existe un número ideal de criterios, hay que tener en cuenta que cuantos más haya, más tiempo necesitaremos para analizar las alternativas.

2. Localiza las alternativas disponibles para solucionar el problema. 

No todos los criterios son igualmente importantes. En este paso, se asigna un peso a cada criterio en función de su relevancia para resolver el problema. Los pesos suelen expresarse en porcentajes que suman un total del 100 %.

Haz una lista de todas las opciones que podrían resolver el problema. 

  • Si estás considerando diferentes estrategias de marketing, por ejemplo, podrías evaluar campañas en redes sociales, publicidad tradicional o marketing de contenido. 
  • En el ejemplo anterior de la elección de un proveedor, las alternativas serían los diferentes proveedores que estemos evaluando. 

3. Evalúa las soluciones 

Una vez que tengas la lista de criterios y alternativas, evalúa cada opción utilizando una escala, por ejemplo, del 1 al 10. Esta puntuación refleja el cumplimiento de cada alternativa con un criterio específico. 

La matriz se puede repartir entre los diferentes responsables o personas involucradas en la resolución del problema. A partir de ahí, cada uno hace su valoración.

  1. Una vez hayas asignado los valores, multiplica la puntuación de cada alternativa por el peso del criterio correspondiente. 
  2. Suma los resultados para cada opción. 
  3. La alternativa con la puntuación total más alta será la mejor opción basada en los criterios definidos.

4. Elige las mejores soluciones 

Con los resultados de la matriz, estarás en una posición más objetiva para tomar una decisión fundamentada. La matriz de criterios no elimina completamente la subjetividad. Sin embargo, proporciona una base sólida para discutir y justificar la elección tomada.

5. Crea un plan de acción para implementar la solución

Una vez tomada la decisión final: hay que crear un plan de acción. En él se deben en definir plazos y los recursos necesarios para ejecutar la solución. 

6. Ejecuta la solución

Lleva a cabo el plan de acción definido previamente y realiza una supervisión para asegurarte que se cumpla. 

7. Evalúa

Puedes aplicar mecanismos de control periódicos, para asegurarte que el problema no se reaviva. Si observas nuevas deficiencias redefine los problemas. Estas creando un proceso de mejora, y esto nunca termina.

La matriz de criterios facilita la toma de decisiones en entornos empresariales, aportando claridad y objetividad al proceso.

Beneficios de la matriz de criterios

Esta herramienta no solo facilita la toma de decisiones, sino que también promueve la transparencia en el proceso. Al contar con una metodología estructurada, se minimizan los sesgos y se fomenta una discusión basada en datos, lo que resulta especialmente útil en la gestión empresarial.

Además, al involucrar a múltiples partes interesadas en la definición de los criterios, se asegura que todas las opiniones relevantes sean consideradas.

La matriz de criterios también es flexible, ya que se puede aplicar a diversas áreas como:

  • Selección de proveedores: evalúa diferentes proveedores en función de factores como precio, calidad, plazo de entrega y servicio al cliente.
  • Lanzamiento de nuevos productos: compara diferentes ideas de productos en función de potencial de mercado, rentabilidad, viabilidad técnica y alineación con la estrategia de la empresa.
  • Inversión de capital: evalúa diferentes proyectos de inversión en función de retorno de la inversión, riesgo, impacto en la empresa y alineación con los objetivos estratégicos.
  • Gestión de recursos humanos: permite evaluar diferentes candidatos de forma objetiva. 

Por ello, la matriz de criterios es una forma eficiente y objetiva de abordar la resolución de problemas en el entorno empresarial. Al seguir una metodología clara, puedes evaluar diversas alternativas y elegir la que mejor se ajuste a tus objetivos. 

En definitiva, la matriz de criterios es una herramienta esencial para la toma de decisiones en entornos empresariales, permitiendo evaluar y priorizar diferentes alternativas de manera objetiva y sistemática. Al aplicar esta metodología, se promueve la transparencia y se minimizan los sesgos, facilitando decisiones basadas en datos y hechos. Además, su flexibilidad permite su aplicación en diversas áreas como la selección de proveedores, lanzamiento de nuevos productos, inversiones de capital y gestión de recursos humanos, optimizando así los procesos de toma de decisiones y contribuyendo al éxito empresarial.

Nota del editor: Este artículo fue publicado con anterioridad y actualizado a 2024 por su relevancia.