Qué es una factura con retención y cómo hacerla 

Emitir una factura con retención es obligatorio en determinados supuestos, que los autónomos y empresarios deben conocer.

• Te explicamos qué es una factura con retención, los tipos de retención aplicables y las obligaciones fiscales del emisor y del receptor de la factura.
• Te dejamos un ejemplo de factura con retención y un modelo de factura con retención descargable.

La emisión de facturas es una tarea imprescindible para el correcto registro de ingresos y para el cumplimiento de determinadas obligaciones fiscales. Entre estas obligaciones fiscales se encuentran la repercusión del IVA y la aplicación de practicar retenciones por parte del pagador. Estas retenciones se aplican en concepto de anticipo del Impuesto sobre la Renta de Personas Físicas (IRPF) o del Impuesto sobre Sociedades (IS). 

Por lo tanto, los responsables de la emisión y contabilización de facturas, tanto emitidas como recibidas, deben conocer: 

• qué es una factura con retención, 
• saber emitirla correctamente 
• y conocer cómo se realiza su registro en el programa de contabilidad de la empresa.

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¿Qué es una factura con retención?

Una factura con retención es un documento que acredita la realización de una operación sujeta a retención de IRPF. En ella, se incluye el porcentaje de retención aplicado y el importe de la retención. Esta cantidad es descontada del importe a pagar por parte del emisor de la factura, debiendo el receptor realizar el ingreso de esta cantidad en la Agencia Tributaria por medio del modelo tributario correspondiente.  

¿Cuándo se debe incluir retención de impuestos en una factura?

La obligación de incluir retención de impuestos en una factura se establece el artículo 99 de la Ley 35/2006, de 28 de noviembre, del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. 

En dicho artículo, se especifica que los pagos a cuenta podrán consistir en:

• Retenciones.
• Ingresos a cuenta.
• Pagos fraccionados.

En general, las retenciones en las facturas se aplican en las siguientes situaciones:

• Prestación de servicios profesionales: cuando un autónomo presta servicios profesionales a otra empresa o profesional.
• Alquiler de inmuebles: en el arrendamiento de locales o inmuebles para actividades empresariales o profesionales.

También puede estar sujeto a retenciones por rendimientos del capital mobiliario, recepción de premios a partir de 300,51€, pagos a cuenta sobre ganancias patrimoniales, pero en estos casos no se emite factura. 

Tipos de retenciones aplicables a las facturas

Existen diferentes tipos de retenciones a cuenta del IRPF que pueden aplicarse a las facturas, según el concepto de la operación y la naturaleza del emisor y el receptor. 

• Retención a cuenta de los rendimientos profesionales: este tipo de retención se aplica a autónomos que prestan servicios profesionales a otras empresas o autónomos. El tipo de retención aplicable es del 15%. En el caso que se inicie una actividad empresarial el porcentaje de retención será del 7% en el año en que se inicie y en los dos años siguientes. Para ingresar en la AEAT las retenciones de actividades profesionales, rendimientos del trabajo, de actividades agrícolas y ganaderas y de premios se utiliza el modelo 111.
• Retenciones a cuenta de rendimientos de arrendamientos o subarrendamientos de inmuebles urbanos: el porcentaje de retención que se aplica es del 19%. Se ingresan en la AEAT utilizando el modelo 115.
• Retenciones aplicables a sectores concretos:

• Retención del 1%: actividades ganaderas de avicultura y de engorde porcino y algunas actividades empresariales en el régimen de estimación objetiva.
• Retención del 2%: actividades forestales, agrícolas y ganaderas (salvo las anteriores).

Funcionamiento del proceso de aplicación de retenciones en las facturas

Para explicarte más claramente el funcionamiento de las retenciones en las facturas te damos respuesta a algunas preguntas clave: 

• ¿Quién aplica la retención? La retención la aplica el emisor de la factura, es decir, el autónomo o empresa que presta el servicio o realiza la venta.
• ¿Quién ingresa la retención? La retención la ingresa el receptor de la factura, es decir, la empresa o profesional que paga por el servicio o la compra.
• ¿Cómo se calcula la retención? El importe de la retención se calcula aplicando un porcentaje a la base imponible de la factura. El porcentaje varía según el tipo de operación.
• ¿Dónde se ingresa la retención? El receptor de la factura debe ingresar la retención en la Agencia Tributaria a través del modelo 111 o 115. El plazo de ingreso es trimestral o mensual.

Obligaciones fiscales en relación con las facturas con retención

Tanto el emisor como el receptor de una factura con retención tienen obligaciones fiscales específicas:

• Emisor:
  • Debe incluir en la factura el importe de la retención aplicada.
  • Debe llevar un registro de las facturas emitidas con retención.
  • Los contribuyentes que realicen actividades económicas estarán obligados a efectuar pagos fraccionados a cuenta del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, autoliquidando e ingresando su importe. Para ello deben presentar el modelo 130, salvo, en el caso de aplicar las retenciones en más del 70% de tus facturas, en cuyo caso no es necesario presentar este modelo. 
• Receptor:
  • Debe ingresar la retención en la Agencia Tributaria a través del modelo 111 o 115 si se trata de alquileres.
  • Debe cumplimentar y presentar los modelos resúmenes anuales 180 o 190.
  • Debe incluir la retención en su declaración del IRPF o en el Impuesto de Sociedades.

Ejemplo de factura con retención de impuestos

Para ilustrar mejor el concepto de factura con retención te dejamos a continuación un ejemplo.

Un autónomo que presta servicios de asesoría a una empresa emite una factura por importe de 10.000 euros. Al tratarse de una prestación de servicios profesionales a otra empresa, el autónomo debe aplicar una retención del IRPF del 15%.

Por lo tanto, entender y manejar correctamente una factura con retención es esencial para el cumplimiento de las obligaciones fiscales y de facturación. Es fundamental conocer cuándo aplicar estas retenciones, los tipos que se deben aplicar y las obligaciones fiscales que conllevan.